5 de febrero de 2009

Irremediable.

La fuerza inexhorable del paso del tiempo, no soy el primer hombre al que le asusta, y dudo que sea el último. En esta época de paso, donde los corazones de los hombres luchan obstinadamente por sobrevivir, unos cuantos hacen de espectadores.

Quizás, perezoso para los cambios, si es que quiero cambiar. Nostálgico, lleno de recuerdos. Extrañamente conocedor de la verdad, y de la imposibilidad de volver atrás, pero aun así, muero por una causa perdida. Una estupidez innata, una mente realmente terca, capaz de hechar a perder cualquier brote de esperanza, o simplemente de crear uno nuevo. Un espíritu de la tragedia, un ente auto condenado al fracaso, a la epidemia, ala desaparición, con un único final, anhelado desde la niñez.

No es ninguna novedad, nací con la marca que ha acabado rigiendo el resto de mi vida. Una búsqueda eterna, donde llamemos le suerte, llamemos le desgracia, he podido hacer algún alto para descansar, y como pasa siempre, luego retomar el camino es mas que difícil. No se si alguna vez quise retomar el camino.

Ya lo decía Séneca "La cosa mejor que ha hecho la ley eterna es que, habiéndonos dado una sola entrada a la vida, nos ha procurado miles de salidas (…) Si te place, vive; si no te place, estás perfectamente autorizado para volverte al lugar de donde viniste." o si mas no, Bethoven "Hace mucho tiempo que me hubiera suicidado de no haber leído en alguna parte que es un pecado quitarse voluntariamente la vida mientras pueda hacerse todavía una buena acción. La vida es hermosa, pero la mía está envenenada para siempre."

Nacer con el veneno corriendo por tus venas es una tortura sin parangón. Puedes resistir contra viento y marea, pero estas completamente indefenso ante ti. No hay nada que justifique tal tortura, nada. Es un dolor, un sufrimiento, una angustia, casi indescriptible, casi irremediable.

2 de febrero de 2009

Deber.

Días de sol, días de lluvia, días deviento y días de nada. Es una epoca de canvio, de situaciones que exigen decisión y pulso firme.

Y aquí estoy yo. Perdido, y hace falta decir que bastante abrumado. No sé que debería sentir, ni que hacer, ni que decir. He hecho un alto en el camino, y me han empezado a salir raíces. Estoy empezando a quedarme atrás, incapaz de seguir el ritmo de mi alrededor, me refugio otra vez, si, otra vez en mi. Parece que no aprendí de los errores del pasado, siempre tan pasional.

Debería volver a vivir la vida plenamente, al fin y al cabo soy solo un hombre, y hay ciertas cosas que no puedo canviar, debo aceptarlas, ahora ya no sirve de nada rechistar, ni llorar, ni siquiera sangrar. Esta vez el dolor a arraigado bien fuerte en mi interior, hace falta algo más fuerte. La podredumbre empieza a hacerse visible, el alma estancada y ahogada esta empezando a traspasar las barreras de su celda. Tarde o temprano, no se sabe, pero solo espero que me lo diga mi interior.

Debería, antes, ahora, la suerte es la que decidirá.