Agonía

Aire, aire, oscuridad, me siento ahogado, presionado, aplastado, necesito moverme, sentir la libertad, sentir que solo el viento es capaz de dominarme y marcar mi destino, librarme de ataduras y cumplir con el sueño de los hombres, volar, y volar hacia donde el sol se va y donde vive la luna.

Quiero nadar en las fuentes del gran abismo, ver donde duermen los dioses, y donde van los caídos, saber donde se crean las vidas, y acompañar a las que se apagan, quiero libertad, una libertad sin limites que solo los más locos soñadores pueden imaginársela, poder escribir versos que no tengan nunca fin, que tan solo se rijan por la métrica de mi corazón.

Quiero seguir los pasos de las mariposas, y quiero que me acune una ola, quiero beber de una lagrima, y comer de un abrazo, quiero soñar de una pena y morir de una alegría, y nacer, de cada adiós, de cada abrazo que da la madre al hijo que parte a la guerra, de cada flor que cae sobre la tumba del fallecido, de cada enfermo que perece en la cama de un hospital, de cada abuelo que muere solo en su casa, de cada bebe que muere antes de ver la luz del sol, quiero ser libre y romper las reglas, y vivir donde empieza la muerte.

Seguir el camino de baldosas amarillas, vivir entre drogadictos, delincuentes, enfermos, ancianos, huérfanos y ser capaz de vestir una sonrisa. Vivir en la abundancia y ser capaz de expresar la humildad.

Y vivir, en una utopía, oír esa melodía, que me hace llorar, y decir que me alegro de poder vivir, y decir, que conozco la alegría, tan solo decir...