8 de julio de 2007

Ansiedad

Chilla, retuércete, pliégate, golpéate, muérdete, córtate, escóndete, aráñate, despedázate, suicídate, pero no conseguirás jamás, liberar tu alma de la ansiedad de la cual ha sido victima.

En piedra te conviertes, ya no sientes, solo sufres, de la mañana a la noche, el día es un suplicio interminable, tu corazón acelerado no sabe cuando parar, tu cabeza, presa de un tormento sin igual, ya no responde, tiemblas, tiritas, te dan espasmos, pero que mas te da, si solo sufres.

En rutina se ha convertido, los primeros días tenia sentido, pero es tan grande la sensación que ya ni puedes acordarte de porque la tenias. Es como una bolsa de aire en tu interior que acabara estallando y esparciendo tus vísceras por doquier.
Y ahora con el paso del tiempo me doy cuenta, de que no se puede remediar, ni con toda una vida por delante, la herida no curara, solo que ya no sangrara...

2 comentarios:

Atenea Danzury dijo...

Saludos!!
siempre es un gusto leerte... ya cambie mi blog.. ahora es:
pensamientospolarizados.blogspot.com

date una vuelta!
saludos!

Li_La dijo...

.. No era que todo tiene solucion??